¿Será posible soportar la fe gravitatoria de mi v(i)olada
sesera? Quisiera tener cosas importantes que decir, por pensar, realizar… un
sueño inmaculado de mi recién adscrita discreción sistemática, será que acaso
me he distanciado, adornado las pocas convencionalidades que me deleitan aún. Y
es que esta infinidad de fonemas que rocían de serena melancolía mi apagada
virtud no son ya suficientes -¿o necesarios?- para crearte.
Un beso -distante
espasmo mental insulso de cercanía- es justo lo que deseo, aquel momento sin
tiempo que te devora con necia descompostura, ahí, justo ahí quiero
destrozarme, he de tocar la membrana homérica de la realidad disforme y morir
sin nombre en lo trágico de tu estampa por mi pintada. Barata es la confianza,
insensata la cordura.
Emborráchate corazón, lirio
de día.