miércoles, 1 de enero de 2014

café

me tomé ese café por los dos, después bese apasionadamente mi alma, como si tú lo hubieras hecho, camine bajo la luz de la noche aferrada a ti, más bien, aferrada a mi imaginación y ese gran deseo por tenerte a mi lado, me acosté acariciando mis pensamientos sobre ti; pero al despertar supe que jamás vas a estar...por eso, ahora el café es para otro...lo demás jamás fue tuyo